(Foto referencial: inforegión) |
Escribe: José de Echave
La semana pasada en la prensa local se publicó que nuestro
país había descendido “del sexto al séptimo lugar en el ranking global de
exploración minera”, según el informe que todos los años publica el Metals
Economics Group. Además, se ha dicho que “el Perú había sido desplazado por
Rusia en el ranking del 2013-2014”.
Sin embargo, se necesitaría mayor rigor para interpretar lo que las propias cifras de este tipo de informes muestran. Pareciera que lo que algunos tratan de hacer es presentar a toda costa una situación en la que el Perú estaría perdiendo de manera indefectible la competencia mundial por atraer inversiones mineras. Lo cierto es que la realidad es bastante más compleja de lo que nos pretenden hacer creer.
Vayamos por partes. ¿El Perú ha pasado “del sexto al séptimo
lugar” en el mencionado ranking? Sí; sin discusión. Así lo demuestran las
cifras. Sin embargo, el “error” es quedarse solamente en esa pretendida y
contundente afirmación y no continuar con el análisis para identificar las
tendencias de fondo.
Las cifras del propio informe demuestran otras cosas y por
ejemplo podrían permitir hacer otro tipo de afirmaciones, incluso aparentemente
contradictorias a las del titular mencionado. Citando la misma fuente -y pese a
lo que se pretende hacer creer-, la participación del Perú en la captación de
inversiones mineras a nivel mundial no ha bajado sino que ha aumentado en el
último año: mientras que nuestro país captó el año 2012 el 4% del monto total
de la inversión en exploración minera mundial, el año pasado hemos aumentado
nuestra participación al 5% (ver gráficos). Además, aparentemente no es tan
cierto que hayamos sido desplazados por Rusia, como se afirma: ahora
compartimos el mismo lugar con ese país.
Por lo tanto, si bien las cifras muestran que el Perú ha caído del sexto al séptimo lugar, en el mismo período hemos subido un punto porcentual en la participación mundial de las inversiones en exploración minera.
Ahora bien ¿cuáles son los temas de fondo que nos presenta la lectura de este informe? Un primer tema es que todo indica que estaríamos entrando a un nuevo escenario y que el súper ciclo de las materias primas y de los crecientes flujos de inversión ya pasó.
Esto no quiere decir que estemos frente una crisis del sector minero que vaya a estar acompañada de una drástica caída de las cotizaciones de los metales, similar a la del período 1998-2002. Sin embargo, los datos muestran por ejemplo, que las inversiones en exploración minera a nivel global han retrocedido en el último año en todo el mundo, por primera vez luego del bache del 2008-2009 (ver siguiente cuadro): si en el período 2008-2009 la caída se debió a la crisis financiera internacional, en esta ocasión la explicación iría por el lado de los fundamentos del propio sector minero a nivel global.
Ahora bien ¿cuáles son los temas de fondo que nos presenta la lectura de este informe? Un primer tema es que todo indica que estaríamos entrando a un nuevo escenario y que el súper ciclo de las materias primas y de los crecientes flujos de inversión ya pasó.
Esto no quiere decir que estemos frente una crisis del sector minero que vaya a estar acompañada de una drástica caída de las cotizaciones de los metales, similar a la del período 1998-2002. Sin embargo, los datos muestran por ejemplo, que las inversiones en exploración minera a nivel global han retrocedido en el último año en todo el mundo, por primera vez luego del bache del 2008-2009 (ver siguiente cuadro): si en el período 2008-2009 la caída se debió a la crisis financiera internacional, en esta ocasión la explicación iría por el lado de los fundamentos del propio sector minero a nivel global.
En medio de este escenario las inversiones mineras en el
Perú no se han desacelerado, como algunos pretenden afirmar; por el contrario
han seguido creciendo, tal y como lo muestran las cifras del propio Ministerio
de Energía y Minas (ver gráfico siguiente). El incremento de la inversión
minera en el país se ha dado principalmente en los rubros de equipamiento de
plantas de beneficio (21.8%); equipamiento minero (49.1%); explotación (10.8%);
otros (48.7%); mientras que el rubro de exploración cayó en -12.3%, como ha
caído a nivel mundial.
Habrá que seguir con atención cómo siguen evolucionando los
indicadores mineros en el país, más aun cuando hemos entrado a una nueva fase
de expansión productiva, basada en el cobre, que nos permitirá crecer a cifras
cercanas a los dos dígitos. Mientras tanto, es una obligación leer las cifras
con mayor rigurosidad para entender la situación actual y sobre todo lo que se
viene.
Fuente: CooperAcción